Cómo pedir perdón por una infidelidad

Te han descubierto.

Esa aventura que pensaste que no iba a salir a la luz, terminó saliendo a la luz, y tu pareja se enteró. El peso de toda la situación ha caído sobre tus hombros, y ahora deseas pedir perdón, pero no sabes cómo. Aquí tienes algunas sugerencias.

Asume lo sucedido

Olvídate de frases del tipo “es que si tú no hubieras…”, o “no me prestabas atención”, o cualquier variante que le eche la culpa a tu pareja. Sin importar la situación, quien ha traicionado la confianza que significa estar en pareja eres tú. Y tener una aventura no los va a solucionar. Sé una persona adulta y toma responsabilidad por lo que has hecho.

Afronta la situación

Cuando tu pareja se entere, pueden suceder varias cosas:

  • Lo negará y seguirá como si nada hubiese pasado

  • Asimilará la información y planeará una forma de devolvértela

  • Encajará las piezas y te hará un escándalo público

  • Encajará las piezas y te hará un escándalo privado

Sea como sea, has herido a una persona que confiaba en ti, y eso conllevará una reacción. El mejor de los casos es el último: el escándalo quedará entre cuatro paredes, pero si no asumes tu responsabilidad ni tratas de enmendar lo que has hecho, las consecuencias podrán ser terribles.

Afronta la crisis y acepta las recriminaciones, que te las has ganado, en especial si tu pareja se ha enterado por sí misma o por terceros, y no por tu propia boca.

Espera a que pase la tormenta

Por un tiempo, tu pareja no querrá ni verte, y estará más que furiosa contigo. Has traicionado su confianza, herido su orgullo, y peor aún si no se enteró por ti. Considera el mudarte por unos días al sofá, o a otra casa si se pone de verdad feo, con tus cosas más valiosas e indispensables. Las demás tienen riesgo de sufrir algún que otro daño.

Pregúntate por qué has sido infiel

Cuando esto sucede, es porque hay algo mal contigo. No con tu pareja, sino contigo. Una vez que pase la tormenta, tu pareja y tú podrán resolver lo que sea que te impulsó a romper con el voto de confianza que él o ella te ha dado cuando comenzaron su relación. Por ejemplo:

  • ¿Te sientes inseguro/a o carente de atractivos?

  • ¿Sientes que algo falta en la relación?

  • ¿Tu vida sexual te es satisfactoria?

  • ¿Estás (o estabas cuando cometiste la infidelidad) bajo mucho estrés?

  • Incluso si es la primera vez que lo haces, ¿habías pensado antes en cometer una infidelidad?

Entiende por qué te estás disculpando

Es evidente que has sido infiel, y que por eso te disculparás. Pero eso no es suficiente: debes hacerle entender a tu pareja que entiendes completamente cómo y de qué manera le has lastimado. No sólo has sido infiel, sino que has traicionado la confianza de tu pareja, destruido la idea de su relación y, quizás, herido de muerte a la pareja. Eso sin contar con la posibilidad de alguna enfermedad de transmisión sexual.

No bajes al archivo

Puede que tu pareja te haya sido infiel a ti antes, pero eso no justifica que la pagues con la misma moneda. Si no te ha sido infiel, no saques los trapos sucios de su relación como justificante. Tú eres quien está en falta, y que esquives la responsabilidad, intentando justificarla, no es algo que una persona responsable o digna de confianza haría.

Discúlpate en privado

La infidelidad es algo privado, y en privado debes disculparte. Si lo haces público, harás que más personas se enteren que has sido infiel, y que tu pareja ha sido la víctima de todo eso. No le hagas pasar más vergüenza de la que ya ha pasado.

Además, NO condiciones tu disculpa. No te disculpes sólo si tu pareja dice que te perdonará o volverá contigo. Si tu disculpa tiene condiciones, entonces no es sincera, y ya has traicionado demasiado su confianza. Y ten en cuenta que tu pareja no tiene por qué perdonarte.

Asume tu culpa

La sociedad considera que un hombre es infiel “porque la monogamia es cultural” o similares, pero si una mujer es infiel, lo hace por venganza. Olvídate de eso y asume lo que has hecho, que eres una persona adulta y ya no estás en secundaria.

Prepárate para preguntas duras

Tu pareja te hará preguntas que, en otra situación, nunca habrías pensado que te haría. Puede que no esté en un estado del todo racional, peor NO se lo insinúes. Responde con sinceridad y tacto, y demuestra tu arrepentimiento en todo momento. Porque si no te arrepientes, entonces no te mereces estar con tu pareja, ya que no le respetas.
 

Imagen de Laura Lauman
Autora del artículo